Después de leer el post de Alejandro sobre los Reyes Magos y esa sensación que se te queda cuando te enteras de que son los padres, yo también he decidido contar mi propia experiencia...
Recuerdo que ya era bastante mayorcita cuando me enteré. Mis padres no se animaban a decírmelo porque mi hermana mayor cuando se enteró se lo tomó fatal...así que ellos prentendían que conservase la ilusión el mayor tiempo posible.
No era la única de mis amigas que aún creía en los Reyes. Aunque tenía una amiga que siempre nos decía que los Reyes eran los padres, María (que era la otra niña que también creía en los Reyes) y yo siempre la decíamos que eso no era verdad y que a ella no la traían nada porque no creía.
La cosa se repetía cada año al volver al colegio después de las navidades... nosotras contábamos con gran ilusión todos los regalos que habíamos recibido y la otra niña nos decía que nos estaban engañando. Así hasta que un día (ya en sexto de primaria) estábamos en clase de Religión y el profesor dijo "como la historia de los Reyes Magos que todos sabemos que hoy en día no es más un invento comercial" (me acuerdo perfectamente de las palabras...). Bueno pues mi cara y la de María fueron un auténtico poema. La otra niña se reía...y María y yo no dijimos nada.
Al llegar a casa con un poco de pena se lo dije a mi madre y ella me explicó todo.
Para mi fue como poner un poco los pies en la tierra... puede que antes ya sospechase de que podrían ser ellos, pero no quería admitirlo. El día de Reyes ya no vuelve a ser igual, no hay tanta magia es como si faltase algo.
Sin embargo, yo adoro la Navidad y como ahora tengo una hermana pequeña que aún no sabe nada, en parte he vuelto a recuperar esa ilusión por el día de Reyes. Aún hoy en día creo que hubiese preferido no enterarme de eso, que siguiese habiendo la misma magia que cuando tenía 6 años.
Y es que en parte sigo siendo un poco niña =).
Y es que en parte sigo siendo un poco niña =).

Hola Laura
ResponderEliminarGracias por compartir la experiencia, muy interesante. Dentro de poco podremos reflexionar más sobre estas cuestiones, creo que lo entenderás mejor. Imagino que también conectarías con esa transcripción del indio hopi que describía el dolor, la decepción al enterarse que los adultos se encontraban detrás de las máscaras. Es un momento que marca el paso a la adultez, a un pensamiento más lógico y racional. Aunque si te fijas, eso no implica necesariamente perder la magia. La magia es una menera de ilusionarse y/o conectarse con lo que vivimos. Es una construcción mental. Lee el siguiente comentario, a ver qué te parece, pensé en él mientras te leía ;)
Érase una vez un joven príncipe que creía en todo, salvo en tres cosas. No creía en las princesas, no creía en las islas y no creía en Dios. Su padre, el rey, le había dicho que esas tres cosas no existían.
ResponderEliminarComo no había ni princesas, ni islas en los dominios de su padre, y ningún signo de Dios, el príncipe le creía a su padre.
Pero un día el príncipe se escapó de su palacio y llegó a otras tierras. Ahí, ante su asombro, vio islas desde la costa, y en estas islas vio a unas extrañas criaturas que no se atrevió a nombrar. Mientras buscaba un bote, se le aproximó un hombre en tenida de etiqueta.
-“¿Esas son islas verdaderas?", preguntó el joven príncipe.
-"Por supuesto que son islas verdaderas", dijo el hombre en tenida de etiqueta.
-"¿Y esas extrañas criaturas?".
-"Son princesas auténticas y genuinas".
-"Entonces, ¡Dios también debe existir!", exclamó el príncipe.
-"Yo soy Dios", respondió el hombre en tenida de etiqueta haciendo una reverencia.
-El joven príncipe regresó a casa lo más rápido que pudo.
-"Veo que has regresado", dijo su padre, el rey.
-"He visto islas, he visto princesas y he visto a Dios", dijo el príncipe en tono de reproche.
El rey permaneció inmutable.
-"No existen islas verdaderas, ni princesas verdaderas, ni Dios verdadero".
-"¡Yo los vi!".
-"Dime cómo estaba vestido Dios".
-"Dios estaba en tenida de etiqueta".
-"¿Tenia las mangas enrolladas de su vestón?".
El príncipe recordó que efectivamente el hombre llevaba las mangas de su vestón enrolladas. El rey sonrió.
-"Ese es el uniforme de un mago. Has sido engañado".
Ante esto, el príncipe regresó a esas tierras, y fue a la misma playa, donde nuevamente se encontró con el hombre.
-"Mi padre, el rey, me ha dicho quién eres tú", dijo el príncipe indignado. "La última vez me engañaste, pero no lo harás nuevamente. Ahora sé que ésas no son islas verdaderas, ni princesas verdaderas porque tú eres un mago".
El hombre de la playa sonrió.
-"Eres tú quien está engañado, muchacho. En el reino de tu padre hay muchas islas y muchas princesas. Pero tú estás bajo el hechizo de tu padre y no puedes verlas".
Pensativamente, el joven regresó a casa. A1 ver a su padre lo miró a los ojos.
-"¿Padre, es cierto que tú no eres un verdadero rey, sino sólo un mago?".
-"Si, hijo mío, soy sólo un mago".
-"Entonces el hombre de la playa es Dios".
-"El hombre de la playa es otro mago".
-"Debo saber la verdad, la verdad más allá de la magia".
-"No hay verdad más allá de la magia", respondió el rey.
Al príncipe lo invadió una gran tristeza. Dijo:
-"Entonces, me mataré".
El rey, mediante la magia, hizo aparecer a la muerte. La muerte se detuvo en la puerta, llamando al príncipe. Este se estremeció. Recordó las bellas, pero irreales islas y las irreales, pero bellas princesas.
-"Muy bien", dijo, "puedo aceptar que tú seas mi mago".
-"Ves, hijo mío", dijo el rey, "también tú ya comienzas a ser un mago".
Reimpreso de The Magus, por John Fowles
Laura, una persona como tu ,nunca pierde la magia ni la de la navidad ni la del dia a dia, es un regalo tener alguien como tu al lado, cariñosa, simpatica con chispa, muy sentimental(un poco llorona)Eres capaz de contagiar tu alegria a todos, con tus abrazos espontaneos, besos y hasta mordiscos .Tienes la dosis de inocencia suficiente para en el fondo de tu corazon "seguir creyendo" aun sabiendo el secreto,pues la magia es eso "creer", aunque no veamos las cosas. Esto nos ayuda en todos los campos de la vida ,hasta en los peores momentos,
ResponderEliminarla imaginacion y los sueños son una verdadera medicina .
Te queremos un monton.
PD.La magia a funcionado, a pesar de estar a 2500km de ti, ahora te siento aqui a mi lado.Besos.
Me alegro de que te guste el blog...y de que pienses todo eso de mi. Lo de los mordiscos me ha hecho mucha gracia jajaja
ResponderEliminarespero que esteis bien, gracias por leerme, yo también te sigo.
Un beso enorme...y ya sabes que dicen que la distancia la ponen las personas y no los km.